TRINIDAD

Creemos en un solo Dios, eternamente existente en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

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LA PALABRA DE DIOS

Creemos que la Biblia es la Palabra de Dios inspirada, infalible y autorizada.

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BAUTISMO EN AGUA

Creemos que todo creyente debe ser bautizado en agua, tal como se nos ha

instruido en la Biblia. El bautismo en agua es una declaración pública de la

unión del creyente con Cristo, tanto en la muerte como en la resurrección.

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ESPÍRITU SANTO

Creemos en la persona del Espíritu Santo, en su bautismo y en su poder para

con la Iglesia. El Espíritu Santo es esencial para revelarnos a Jesús y a través de

nosotros. Él es nuestro ayudador. A través de la morada del Espíritu Santo, el

cristiano puede vivir una vida piadosa y actuar en los dones del Espíritu.

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LOS DONES DEL ESPÍRITU

Creemos que los dones del Espíritu están disponibles para nosotros hoy y que

los cristianos de hoy deben buscarlos. Estos dones son simplemente

herramientas que el Señor nos da para alcanzar, amar y guiar a las personas

hacia Él. Los dones son para edificar la comunidad de la iglesia y alcanzar a los

perdidos.

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PRESENCIA E INTIMIDAD CON DIOS

Tenemos acceso pleno y completo al Padre gracias a lo que Jesús hizo en la cruz.

Sin esto, no tenemos nada. De eso se trata todo. Debemos cultivar la presencia

de Dios en nuestra vida personal y ministrar a los demás desde ese lugar.

Nuestra máxima prioridad es seguir adonde Su presencia nos lleve.

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ORACIÓN Y ADORACIÓN

La oración y la adoración son componentes esenciales de la vida de un creyente. Es

una manera de conectarnos con Dios, recordar quién es Él, recordar quiénes

somos nosotros en Él, construir una comunidad con los demás y experimentar la

presencia de Dios.

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JUSTICIA

Creemos que la justicia de Dios es la restauración de toda violación del amor.

Debemos vivir como canales del amor de Dios. Dios es amor y su deseo es

revelarse a través de sus hijos. Creemos que el amor es siempre la respuesta para

traer justicia a las situaciones y al mundo que nos rodea. Creemos que la Iglesia es

la respuesta a un mundo perdido y moribundo.

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HONOR

Honramos porque somos honorables. El honor comienza en nuestro propio

corazón, no porque consideremos algo digno de honor. Al honrar a Dios, nos

honramos a nosotros mismos, honramos a los demás y obtenemos y recibimos la

perspectiva y los propósitos de Dios para nuestras vidas. Creemos que la humildad

precede al honor.

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SERVICIO

La Biblia nos enseña que Jesús no vino para ser servido, sino para servir. Servir a los

demás es una manera de reflejar a Cristo ante los demás y exponerlos a su amor

extraordinario.

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SEGURIDAD

La seguridad es para beneficio de todos. Las reglas se deben seguir al 100% del

tiempo porque son reglas por algo.

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CRECIMIENTO Y ASUNCIÓN DE RIESGOS

El crecimiento no se encuentra en tu zona de confort. A lo largo de la pasantía,

tendrás muchas oportunidades de hacer cosas que nunca antes habías hecho. La

mentalidad de nuestros pasantes debe ser: si no has hecho algo, ¡hoy es el primer

día! Es importante que vayas más allá de donde has estado antes y estés dispuesto

a tomar la iniciativa para desafiarte a ti mismo.

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GENEROSIDAD

Es nuestra alegría ser generosos. No tenemos que ser generosos, podemos serlo.

Cristo nos lo demostró muy bien al darlo todo, incluso su propia vida por nosotros.

Creemos que es mejor dar que recibir y siempre nos asociamos con el corazón de

Dios cuando elegimos caminar en la alegría de la generosidad.

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UNIDAD Y COLABORACIÓN

La unidad no siempre es un acuerdo, la unidad se encuentra en Cristo. Es

importante que todos los miembros del equipo se sientan valorados, apoyados,

amados y conectados a pesar de nuestras diferencias. Cuanto más nos amemos

unos a otros, mayor será el poder en el que caminaremos y demostraremos juntos.

La Biblia dice que conocerán a Dios por la forma en que nos amemos unos a otros.

Valoramos trabajar juntos como un cuerpo para impactar el reino y creemos que el

trabajo en equipo crea un entorno seguro para que las personas ganen y fracasen,

pero que, no obstante, sigan siendo amadas. Siempre nos vemos unos a otros a

través de la lente de Dios y permanecemos en unidad a través de Su amor.

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EMPODERANDO

Ten siempre presente cómo puedes activar a quienes te rodean y expresar cómo

Dios ve a otras personas. Desafiamos a los demás a asumir la identidad que Dios les

dio y a elegir ser parte del descubrimiento y apoyo de los demás en todo lo que Dios

tiene para ellos.

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ALEGRÍA Y GRATITUD

El gozo del Señor es nuestra fuerza y la fuerza es necesaria todos los días de

nuestra vida. Lo que celebramos se convierte en la norma cultural. La

celebración cultiva una atmósfera de agradecimiento, esperanza, amor y fe por

todo lo que Dios puede hacer.